Catedral
de Pamplona
Cronología
de la Catedral
En
la ciudad episcopal de Pamplona existía una espléndida
catedral románica, de la que quedan algunos restos escultóricos
de gran calidad en el Museo de Pamplona. A principios el siglo XIV
(1317) se decidió construir un claustro nuevo -ya de estilo
gótico- adosado a esta antigua catedral románica.
Mientras
éste se construía, en el año 1389, el templo
románico se derrumbó y fue necesario construir un nuevo edificio
ya correspondiente al gótico. La actual Catedral de Pamplona
es un templo gótico que se comenzó a construir a continuación
de este derrumbe, allá por finales del siglo XIV.
Primero
se construyeron las naves y el transepto, en pleno siglo XV, después
se terminó la cabecera y en los primeros años del
XVI. Con todo, su estructura guarda una gran unidad estilística.
La
última campaña importante es la que levantó
la actual fachada occidental que ya es neoclásica, obra de Ventura
Rodríguez en el siglo XVIII.
El
templo
Tiene
tres naves de tramos rectangulares con capillas laterales, transepto
acusado en planta y alzado, presbiterio poligonal y extraña
y pequeña girola de tramos pentagonales y hexagonales. Las
bóvedas son de crucería sencilla menos la del tramo
del crucero que es de terceletes, con buenas esculturas en las claves
y la del presbiterio que es estrellada.
Las
naves de la catedral están separados por arcos apuntados sobre pilares
con columnas adosadas.
El
interior es armónico pero algo arcaico pues evita la desmaterialización
del muro típico del gótico francés bajomedieval.
Por ello, el aspecto es algo pesado y compacto al disponer de poco
vanos ya que no existe triforio y las ventanas del claristorio son
de tamaño moderado. En el claristorio se conservan cuatro
vidrieras originales del siglo XVI de excelente colorido y factura.
Se
han descubierto pinturas en las naves a consecuencia de una restauración
reciente.
En
el plano escultórico hay que destacar el magnífico
Mausoleo de los Reyes de Navarra (Carlos III el noble y Leonor de
Trastamara) realizado entre 1413 y 1419 en alabastro por el escultor
flamenco Johan Lome de Tournay, donde aparecen los dos monarcas
con doseles sobre un lecho sepulcral exento, cuyos frentes presentan
28 estatuas de plorantes.
Puerta de San José
En
cuanto al exterior del templo hay que añadir que en su fachada
norte se ha conservado una puerta lateral -la Puerta de San José-
con decoración del gótico flamígero del siglo XV. En su pequeño
tímpano se representa a Cristo bendiciendo a la Virgen tras
su coronación.
Por
último, citaremos una
pequeña puerta románica procedente del antiguo templo
del siglo XII y que comunicaba con la cillería.
El
claustro
Sin
embargo, el principal aliciente de la Catedral de Pamplona es su
magnífico claustro, uno de los mejores de Europa del siglo
XIV, siendo especialmente interesante desde el punto
de vista escultórico.
Como ya se indicó, este claustro se inició a principios del
siglo XIV (1317), siendo anterior al actual templo gótico, cuando
aún estaba en pie la antigua catedral románica.
Tiene
cuatro pandas con arcos enmarcados con gabletes con la tracería
típica del siglo XIV con decoración geométrica de diferente diseño,
según la época de su construcción, que fue evolucionando ligeramente
con las décadas.
Además
cuenta con cuatro portadas monumentales: la Puerta de Nuestra Señora
del Amparo, que comunica el templo con el claustro; la Puerta Preciosa,
que es la puerta de comunicación con el dormitorio, del siglo XIV;
la Puerta del Refectorio y la del Arcedianato, que es la puerta
de comunicación entre el claustro y el arcedianato.
Introducción
a la escultura del claustro de la catedral de Pamplona
La
escultura de estas puertas del claustro de la catedral de Pamplona
es de principios del siglo XIV, e independiente a la construcción
del posterior templo gótico. En este conjunto escultórico no existe
unidad estilística, puesto que se aprecia una gran diversidad de
talleres intervinientes.
Si
la Corona de Castilla tiene su momento de auge escultórico
gótico en el siglo XIII, decae en el XIV, todo lo contrario
que en Navarra y Aragón, donde se experimenta su máximo
esplendor artístico entre los siglos XIV y XV.
En
el caso que nos ocupa, hay que añadir que el Reino de Navarra
se encontraba muy ligado a Francia por lo que lo que llegan a estas
tierras talleres franceses que dejan su impronta en la catedral
pamplonesa. Además, en la seo navarra también intervienen
algún que otro maestro procedente de Inglaterra, como Guillermo
el Inglés.
Puerta del
Amparo
Fue construida
entre 1350 y 1355. El tímpano se conserva policromado y está
ocupado por la escena de Dormición de la Virgen. En este
caso, el cuerpo de María está rodeado de los apóstoles
y ángeles, mientras Cristo desciende a por su alma para llevarla
al Cielo.
Estilísticamente,
se aprecia gran dramatismo en los gestos y movimiento en la escena,
a la par que cierto recargamiento puesto que las figuras ocupan
casi todo el espacio. Otras características del maestro o
taller que lo esculpió es el de los abundantes plegados de
las túnicas y por las figuras un tanto corpulentas.
Durante
mucho tiempo, se relacionó este tímpano con la Dormición
de la Virgen de Estrasburgo, también muy expresiva. Hoy se
piensa que la procedencia de este taller es Rieux, en el sur de
Francia, cerca de Toulouse.
En el Parteluz
de esta puerta aparece la Virgen con el Niño. De nuevo la
expresividad de ambos rostros es lo más elocuente.
Puerta del
Refectorio
El refectorio
de la catedral de Pamplona es una sala rectangular dividida en tramos
barlongos con bóveda de crucería. En el siglo XIV
se decora con ménsulas de tema profano: perros y aves atacándose,
cacerías de jabalíes, etc. y con decoración
pictórica, hoy arrancada y depositada en el Museo de Navarra,
para su mejor conservación.
La puerta de comunicación de esta dependencia con el claustro
tiene arcos apuntados muy agudos con un tímpano dividido
en dos registros.
En el registro
superior aparece la Entrada de Cristo en Jerusalén y en el
inferior se muestra la escena de la Ú ltima Cena.
Puerta
Preciosa
La llamada Puerta
Preciosa se construyó entre 1350-1360 y sirve de comunicación
entre el claustro y el dormitorio de los canónigos. Se llama
así porque el clero, cuando acudía al dormitorio,
lo hacía en procesión litúrgica mientras se
cantaba a la Virgen un salmo que comenzaba con la palabra "preciosa",
en alusión a la Virgen:
El tímpano
se organiza mediante cuatro registros dedicados a la vida de la
Virgen inspirada por evangelios apócrifos: anunciación
de la muerte de la Virgen, movilización de las apóstoles,
que son transportados a Jerusalén por nubes, la Dormición
rodeada por los apóstoles y la Coronación.
La iconografía
de esta puerta debió inspirar a las de La Guardia y Vitoria.
Puerta del
Arcedianato
En esta portada
intervino Guillermo el Inglés. Se alude a la Pasión de Cristo: crucifixión,
resurrección de Cristo y visita de las Tres Marías al Santo Sepulcro.
Grupo
de la Adoración de los Magos
En
el muro noreste del claustro existe un grupo escultórico donde aparecen
los Reyes Magos siendo recibidos por la Virgen con el Niño, que
está coronada por un doselete para destacarla. Se atribuye a Jacques
Perut.
Junto
al claustro aparecen una serie excepcional de dependencias, como
la Capilla Barbazana, que es una capilla funeraria realizada por
el obispo Arnaldo Barbazán que sirvió de modelo e
inspiración de la capilla que mandó construir Álvaro de Luna
en Toledo. También se conservan el dormitorio y refectorio
de los canónigos y el Arcedianato.
Capilla
Barbazana
La
Capilla Barbazana se construyó en la primera mitad del siglo
XIV, entre 1330 y 1335. Se trata de una sala de planta centralizada
y función funeraria (obispo Barbazán).
Está cubierta mediante una bóveda estrellada excepcional,
que transforma el espacio cuadrado de la planta a la forma poligonal
donde se asienta la bóveda mediante trompas.
Los
arcos y nervios acaban en ménsulas con decoración
escultórica, también existente en las claves de las
bóvedas.
En
las ménsulas se colocó escultura profana: cacerías
de ciervos, perros, etc. lo que resulta bastante original para este
tipo de espacios con función funeraria.
Museo
Catedralicio y Diocesano
El
Museo Catredalicio y Diocesano de la Catedral de Pamplona está
instalado en el antiguo refectorio. Cuenta con valiosas obras de
arte medieval y moderno de orfebrería, imaginería
en madera, pintura, etc.
Más
información del Museo
Catedralicio y Diocesano de Pamplona