El
Primer Románico
El
románico se desarrolló entre finales del siglo X
o principios del XI y hasta bien entrado el siglo XIII (sobre
todo en entornos rurales) Se trata pues de un periodo muy amplio
que tradicionalmente se ha subdividido en tres etapas:
El primer Románico
Estamos a finales del siglo X y comienzos del XI. Se trata de
una época crucial por los grandes cambios sociales, políticos
y culturales que sufre Europa. Como veremos, la arquitectura,
influida por el mundo carolingio, genera una gran variedad de
soluciones y estéticas, combinando elementos tradicionales
con otros nuevos, llevando incluso a verdaderas "contradicciones
artísticas" haciendo difícil el establecimiento
de características comunes.
El Románico
pleno
Época en la que todas las características del románico
están ya totalmente prefijadas, incluyendo la escultura
monumental, hecho verdaderamente diferenciador. Es, sin duda,
la época de mayor esplendor.
El Tardorrománico
En el tardorrománico la escultura monumental que nace en
la etapa anterior se vuelve más naturalista y menos simbólica.
La decoración general alcanza mayor barroquismo y en la
arquitectura se comienzan a emplear elementos que el gótico
asumirá con un concepto nuevo (arco apuntado y bóveda
de crucería).
Contexto
Histórico del desarrollo del Primer Románico
Nos situamos alrededor
del año 1000. El inicio de este nuevo lenguaje artístico
coincide con una serie de cambios sociales y políticos
de gran trascendencia: el régimen feudal europeo va a ir
entrando en crisis mientras se da un aumento del poder real.
La sociedad se hace más
abierta, comenzando el renacimiento de antiguas ciudades abandonadas
y creación de otras nuevas, Tras la crisis y violencias
del siglo X se va a producir un nuevo impulso a nivel espiritual
y también material gracias principalmente a la mejora en
técnicas de agricultura.
Por su parte, las peregrinaciones
alcanzan su máximo apogeo y se produce un intenso desplazamiento
de gentes de unas zonas a otras (en España a este fenómeno
general se suma el movimiento repoblador de las tierras reconquistadas,
tanto de gentes del país, como de francos). Este flujo
de personas va a hacer, además, que las nuevas ideas se
transmitan de una manera mucho más rápida.
Este auge económico
provoca también un renacer artístico, que se ve
reforzado por una serie de avances técnicos, por ejemplo
en el corte de la piedra, que hace que la arquitectura sea más
sólida y por ello también más compleja, utilización
de nuevas herramientas y procedimientos, como para elevar los
sillares, mejora de los medios de transporte, etc.
Estos y otros factores
han hecho que que muchos autores hayan hablado de un auténtico
"Renacimiento Románico" en el siglo XI. Lo que
es evidente es que el Románico se convierte en el primer
movimiento cultural y artístico internacional de Europa.
Focos
regionales del Primer románico
El creador del término
"Primer románico" fue Puig i Cadafalch, refiriéndose
a un arte cambiante que se da a partir del año 1000 en
algunos lugares de Europa.
El primer Románico
no florece en todos los territorios europeos, sino que se da puntualmente
en algunas zonas.
Parece que surge en Borgoña,
como consecuencia de la fundación del Monasterio de Cluny.
Otro
centro dinamizador va a ser la Lombardía, en el
norte de Italia, región que conservaba un alto nivel técnico
heredado de los romanos.
Otros centros generadores
van a ser Cataluña, por influencia lombarda.
También van a ser
importantes antiguas zonas otonianas, de técnica
muy refinada que también influirán en los balbuceos
del nuevo estilo.
Aún así
el llamado"Primer Románico" es un estilo difuso
y muy cambiante que tiene características diferentes según
las zonas e incluso dentro de una misma zona. Se dan titubeos
y cambios de modelo, es decir, parace como si se dieran distintos
ensayos hasta alcanzar la magnificencia y homogeneidad del románico
pleno.
Así pues, va a
ser difícil establecer unas características comunes,
aunque algunos hechos sí relacionan estos distintos impulsos: