Guía de la iglesia de Castil de Lences,
Burgos
Introducción y apuntes históricos
Castil de Lences se ubica al noroeste
de la comarca de La Bureba (Burgos) a 764 metros sobre
el nivel del mar. A pesar de sus pequeñas dimensiones (contaba
con 39 habitantes censados en el año 2020) es una de las
localidades más pintorescas de la provincia de Burgos,
gracias a la buena conservación de su arquitectura tradicional
que muestran las calles y viviendas de su caserío.
Su fundación tiene una fecha tan temprana
como las últimas décadas del siglo IX, cuando el
conde castellano Diego Porcelos puebla Poza de la Sal, e intenta
defenderla creando un grupo de fortificaciones en puntos estratégicos
de su entorno. Y es que el topónimo "Castil"
procede de castillo y de castro.
Una de las particularidades de Castil de Lences
es que cuenta con un Convento de Clarisas habitado por monjas
de clausura. Se trata del Monasterio de la Asunción que
fue fundado en 1282 por doña Sancha de Rojas y Velasco,
al parecer sobre el solar del citado antiguo castillo que dio
nombre a la villa. Es especialmente destacable en este monasterio
el claustro gótico primitivo de la época de su fundación.
La iglesia románica de Santa María
de Castil de Lences
Por su parte, la iglesia románica de
Santa María cumplió y cumple las funciones de templo
parroquial. Se ubica a medio centenar de metros al este del convento.
A esta iglesia típica del románico
rural burgalés, se le han añadido a lo largo de
su historia multitud de capillas y otras estancias adosadas a
sus muros. Afortunadamente, éstas no han tapado sus tres
zonas de mayor importancia y belleza, que son la cabecera, la
puerta de ingreso en el muro sur y el imafronte o fachada oeste.
Como veremos, el interior sí se ha conservado con mayor
integridad.
Exterior
Centrándonos exclusivamente en lo que
nos queda de su arquitectura románica, lo primero que nos
llama la atención es que su fábrica está
realizada con piedra toba de color gris rojizo (por las impurezas
de hierro) que no es otra cosa que un tipo de roca sedimentaria,
como todas las calizas, pero de una gran porosidad por lo que
le presta ligereza. Sólo en las partes esculpidas como
canecillos, capiteles de las columnas del ábside, elementos
de la portada y ventanal occidental se usó un tipo de piedra
más compacta y mucho menos porosa.
Cabecera
El ábside es de planta semicilíndrica
con dos columnas entregas que lo segmentan en tres paños
verticales o calles. En cada uno existe una estructura tipo ventanal
con arco y columnas, pero las dos laterales siempre estuvieron
cegadas y la del centro fue tapada en época posterior.
Tienen como característica contar con tímpanos cuya
superficie se halla horadada por tres huecos semicirculares, de
probable simbolismo trinitario.
Entre los canecillos los hay lisos, geométricos
y con cabezas humanas. El mejor de todos es el que muestra una
pareja de aves simétricamente dispuestas.
Puerta
La puerta del muro meridional se resguarda
bajo un porche abierto. Tiene una apreciable amplitud con numerosas
arquivoltas donde se combinan simples baquetones con motivos geométricos
de gran complejidad, alguno esculpidos en relieve y ahuecados
con trépano. El guardapolvos tiene decoración de
puntas de diamante.Los apoyos inferiores
son las jambas y cuatro pares de columnas con capiteles fitomórficos,
siendo de especial calidad el ubicado en el extremo oriental (a
la derecha del observador).
Por las diferencias estilísticas entre
la escultura de la puerta y la del resto del templo, se piensa
que aquélla pudo realizarse por otro taller en época
más tardía.
Imafronte
El imafronte o fachada oeste también
se ha logrado librar de construcciones parásitas y puede
contemplarse sin obstáculos.
Conserva un ventanal de tipo portada con arquivolta
apuntada decorada con puntas de diamante y guardapolvos ajedrezado.
Uno de los capiteles es figurado con una pareja de aves que levantan
una pata para agarrar lo que podría ser un tallo de una
planta. Encima hay una espadaña románica retocada
en época posterior.
Interior
La iglesia de Santa María de Castil
de Lences está completamente abovedada con los abovedamientos
habituales del románico: medio cañón en la
nave y el presbiterio y de cuarto de esfera en el ábside.
La citada bóveda de medio cañón de la nave
se hizo acompañar de arcos fajones doblados que reposan
sobre responsiones a base de tres medias columnas, la central
de doble anchura que las laterales.
Sumando los capiteles de estos grupos de semicolumnas
con los del ábside, tenemos algunos capiteles figurados
pero de iconografía no muy clara: