Castillos
de Huelva
Huelva
es tierra de magníficos castillos, como veremos.
Esta provincia,
al igual que el resto de Andalucía, fue testigo en la Edad
Media del esplendor de castillos, torres y palacios.
En el caso de
la provincia de Huelva, este panorama es especialmente rico como consecuencia
de su carácter costero (torres defensivas en la costa) y especialmente
por su situación fronteriza con Portugal.
Esta doble posición
geográfica hace de esta tierra una cuna de innumerables construcciones
dignas de nuestra atención.
De
todo el abanico de castillos y fortificaciones onubenses hemos elegido
los de Cortegana, Niebla, Aroche, Aracena, Cartaya y Cumbres Mayores.
Castillo
de Cortegana
El Castillo
de Cortegana se sitúa sobre una colina en la localidad
del mismo nombre, se piensa que sobre los restos de una construcción
musulmana.
El origen de la
fortificación pudo ser la entrega de la misma, hacia 1253,
por Alfonso X al concejo de Sevilla, aunque aún no se
ha dilucidado con exactitud debido a la falta de fuentes. De los que
sí podemos estar seguros es que el castillo de Cortegana fue
la base de la defensa de la ciudad contra los portugueses dada su
cercanía con la frontera.
De planta rectangular
el castillo posee seis torres: una de ellas cilíndrica y cinco
cuadradas. Además, se puede hacer una división clara
del conjunto entre la zona sur, con el patio de armas, las entradas
y un aljibe; y el norte donde se sitúa la zona residencial,
las estancias dedicadas al alojamiento de sus habitantes que, está
dividida a su vez, en tres plantas. La superior, que es una terraza,
estaba repleta de armas defensivas y comunicaba la zona habitable
con la torre del homenaje, de posterior construcción.
Castillo
de Niebla
El castillo
de Niebla, que se localiza en el pueblo homónimo,
encuentra sus orígenes en tiempos romanos, restos que fueron
utilizados en la construcción musulmana, artífices de
la fortaleza que pasa a manos cristianas en 1262 gracias a la acción
de Alfonso X.
Lo más
destacable de la fortaleza es su muralla, un recinto de dos mil metros
de amplísimos muros color rojo tapial y sillares, cinco puertas
y cuarenta y ocho torres, rectangulares y octogonales, encontrándose
dentro de ellos las cuatro parroquias de Santa María, San Miguel,
Santiago y Lorenzo. Cuatro de estas puertas, las del este, lindan
con el río Tinto, zona minera, como foso. En el norte se situaba
el alcázar musulmán, luego castillo de los Guzmanes,
con doble muralla rematada con torres cuadradas y octogonales.
En el siglo XV,
dada la reforma del Conde de Niebla, se procedió a la separación
en dos del conjunto, quedando el patio de armas al oeste y la zona
residencial al este, a la que se añadieron dos torres de forma
cilíndrica.
Por último,
de la torre del homenaje parte la zona principal con cuatro grandes
bastiones pentagonales.
Castillo
de Aroche
En la localidad
de Aroche encontramos el castillo de las Armas, de
origen almorávide y por tanto construido entre los siglos XI
y XIII.
En 1263 el castillo
pasa a manos cristianas gracias a la intervención de Sancho
II de Portugal hasta que, unos años después, en 1293,
se anexiona a las posesiones del Reino de Castilla. Es en este momento
cuando Sancho IV manda una reforma, dando lugar a la apariencia que
hoy en día conocemos excepto por la plaza de toros que alberga
en su interior, construida en 1802.
El recinto se
compone de una muralla exterior franqueada por diez torres, cuadradas
todas ellas, entre las que destacan tres por su mayor altura y su
marcado carácter defensivo, visto por ejemplo en la presencia
de saeteras. Además estas tres torres se hallan en los tres
ángulos del recinto, permitiendo delimitar su planta en forma
de triángulo rectángulo. La altura alcanza los diez
metros, construidos en tapial a base de mampostería y cintas
de ladrillo.
Castillo
de Aracena
Situado en lo
alto de un cerro de la localidad del mismo nombre se alza el Castillo
de Aracena, construcción levantada en el siglo XIII
sobre restos anteriores, tal vez incluso romanos, gracias a que en
1250 la zona es conquistada por las tropas hospitalarias de Alfonso
III, rey de Portugal.
La muralla que
rodea el conjunto traza un recorrido irregular, acentuando de esta
forma su matiz defensivo que, gracias a su gran amplitud, podía
albergar dentro de sus piedras, las viviendas medievales. A lo largo
de su recorrido podemos encontrar hasta siete torres entre las que
destaca la del homenaje que además de ser la más grande
de ellas, divide el recinto en dos, situándose en uno de los
lados la vivienda o estancias principales.
Una construcción
posterior dentro del conjunto, la iglesia mudéjar, se cree
fue levantada por mandato de la Orden del Temple a quien había
sido cedido el castillo de Aracena por agradecimiento a sus acciones
en defensa del cristianismo.
Castillo
de Cartaya
En el pueblo de
Cartaya fue erigido a principios del siglo XV el Castillo
de los Zúñiga como parte de la plaza fuerte
de Pedro de Zúñiga de quien como puede observase, toma
su nombre y su fuerte carácter defensivo ante el río
Piedras y su cercanía al mar.
De planta rectangular,
la muralla que rodea el conjunto alcanza los ocho metros de altura
y está franqueada por siete torres, de planta cuadrada, que
en otro tiempo debieron suponer la segunda línea defensiva
amurallada tras un primer recinto de medidas mayores.
De entre las siete
torres destacan la del homenaje, de seis metros, y la de Las Campanas,
de cinco metros, cuya función fue defender la puerta principal
del conjunto defensivo.
Castillo
de Cumbres Mayores
El Castillo
de Sancho IV el Bravo fue mandado construir por dicho rey
en la localidad onubense de Cumbres Mayores en 1293 con el fin de
defender estas tierras de los ataques portugueses. Los historiadores
han podido determinar que la construcción del castillo se alargó
muchos años en el tiempo.
Las murallas,
rematadas con almenas, siguen un recorrido irregular, del que alcanzamos
a contar nueve lados, el mismo número que de torres posee,
de diez metros de altura, construidas de mampostería reforzadas
con sillares y sillarejos en sus esquinas.
Otros
castillos de Huelva
Otros castillos
de Huelva que citamos aquí es el de la Reina en Palma del Condado
o el de Paymogo, construido en el siglo XV en la localidad del mismo
nombre.
(Autora
del texto del artículo/colaboradora de ARTEGUIAS:
Ana Molina Reguilón)