Guía
del Románico en la Comarca de Odra-Pisuerga
La Comarca
de Odra y Pisuerga se corresponde con el sector occidental
de la provincia de Burgos. Es así denominada porque está
regada por el río Pisuerga y su afluente el Odra.
Territorio
limítrofe con Palencia, tiene la característica
de ofrecer una orografía bastante llana, con amplios campos
de cereal y masas arbóreas dispersas. La capital de la
comarca es la antigua villa de Villadiego.
En
cuanto al románico que encontraremos en estas tierras,
se asemeja al de otras comarcas aledañas, es decir, se
compone de un tipo de iglesias tardías donde prevalece
la calidad y monumentalidad de la arquitectura frente a la finura
en las tallas escultóricas.
Otra de
las características de buena parte de estos templos medievales
es su carácter especialmente tardío, probablemente
realizadas a finales del siglo XII o ya en las primeras décadas
del XIII. Dicho aspecto se aprecia, por ejemplo, en las puertas
de ingreso de algunas de las iglesias de la comarca, con arquivoltas
muy agudas y poco o nada decoradas, en probable remedo de la arquitectura
cisterciense.
A ellos
hay que añadir una serie de construcciones de bien entrado
el siglo XIII y de carácter más gótico que
románico, como las iglesias Villamorón u Olmos de
Picaza, entre otras.
También
es frecuente que las fábricas tardorrománicas fueran
modificadas o reconstruidas en siglos bajomedievales (en estilo
gótico tardío) dada el auge económico y político
que alcanzaron el territorio burgalés en el siglo XV y
comienzo del XVI.
De la
nutridísima nómina de iglesias o restos románicos
de la comarca, nos pararemos especialmente en las iglesias de
Padilla de Abajo, Arenillas de Villadiego, Boada de Villadiego,
Villaute, Arenillas de Riospisuerga, la Ermita de Nuestra Señorita
de Zorita de Melgar de Fernamental y la iglesia parroquial de
San Lorenzo en Villadiego.
Padilla
de abajo. Ermita de Nuestra Señora del Torreón
La Ermita
de Nuestra Señora del Torreón de Padilla de Abajo
es una buena iglesia románica de principios del siglo XIII
y tiene elementos de mucho interés.
Lo primero
que hay que destacar es que está a las afueras del pueblo
rodeada por campos de labor por lo que su estampa es magnífica
y su visita una delicia.
La
Ermita de Nuestra Señora del Torreón tiene
la planta más frecuente en el románico rural castellano:
una sola nave, cabecera orientada canónicamente hacia oriente
y hastial a poniente.
Tiene
la cabecera con una sección recta o presbiterio y un ábside
semicircular separado por pronunciado codillo. Existen cuatro
columnas y tres ventanales en los paños resultantes. Son
destacables los canecillos por la expresividad de sus relieves,
donde predominan especialmente las caras demoníacas con
cabellos puntiagudos (imitando, probablemente las llamas del fuego
del infierno).
La
portada es abocinada, con cuatro arquivoltas decoradas con motivos
geométricos. Los capiteles de las columnas son interesantes.
En uno de ellos podría estar tallada el tema de la "Bocca
della Veritá", cabeza de mármol en Roma en la que
dos jóvenes meten sus manos tratando de probar su inocencia
en un lance de amor.
Boada
de Villadiego
La iglesia de Boada
de Villadiego se encuentra encaramada en un altozano sobre
el pueblo, rodeada de un muro que circunda el espacio del atrio.
Es el habitual templo
de una nave con ábside de semitambor, construido plenamente
con sillares. En el interior, la nave se modificó con la
adición de una bóveda estrellada. También
se anexionaron dependencias en el costado norte.
El ábside tiene
dos haces de triples columnas (más estrechas las laterales
que la central) sobre contrafuertes que generan tres paños
con sus respectivos ventanales.
Los ventanales
parecen estar influidos por el taller que trabajo en la cercana
iglesia de La Piedra (y otros templos probablemente desaparecidos)
que tienen la particularidad de emplear otro tipo de piedra para
los bloques esculpidos. También como en la parroquial de
La Piedra los fustes son estriados y la arquivolta apuntada está
decorada con motivos ondulantes.
Hay que fijarse en la
escultura de canecillos y capiteles, pues alternan los motivos
meramente vegetales con otros iconográficos muy interesantes,
como es el caso del capitel que muestra la escena de la "Pesca
Milagrosa".
La portada, que se sitúa
en el muro meridional, es acusadamente austera, sin concesiones
escultóricas o decorativas. Consta de tres arquivoltas
ojivales de perfil plano y aristas vivas que se apoyan sobre jambas
sin columnas.
Arenillas
de Villadiego
La de Arenillas de Villadiego
es una imponente iglesia de magnífica fábrica y hechuras románicas
donde destaca la calidad del ábside y su portada con arquivoltas
muy apuntadas y decoración de dientes de sierra.
A la construcción
románica original se le añadió una dependencia
alargada en el muro sur junto a un pórtico que cubre la
puerta citada, además de una torre campanario renacentista
en el extremo occidental y el muro del cementerio en el lado norte.
A pesar de tanto aditamento
moderno, la silueta de la iglesia es soberbia gracias a sus equilibradas
formas.
El ábside tiene
las habituales columnas entregas y un ventanal en el paño
central cuyo tímpano está esculpido con hojas radiales
de claro simbolismo solar. Otra pareja de ventanas se disponen
en los muros presbiteriales.
La escultura de capiteles
y canecillos, sin ser de gran calidad, es de las de mejor nivel
de la zona.
Villaute
La iglesia de San Martín
de Villaute pertenece a esa original y reducido grupo de iglesias
románicas de dos naves, con sus respectivos ábsides casi
gemelos.
Como sucede en otros casos
parecidos, tan peculiar planta y estructura es fruto de dos campañas
sucesivas y no de un proyecto original.
En un momento dado de
finales del siglo XII se construiría un templo de una nave
y cabecera de un ábside al modo habitual. Unas décadas
después, seguramente a principios del siglo XIII, se eliminó
el muro sur de esta iglesia y se construyó otra nave de
parecidas hechuras y dimensiones. Probablemente, esta ampliación
se debiera a un aumento demográfico en la localidad.
El ábside norte
-el más antiguo- presenta una articulación con dos
columnas y un estético ventanal que tiene arquivolta zigzagueada
y baquetón sogueado, además de una chambrana ajedrezada.
Los capiteles tienen aves y una sirena-pez de doble cola.
Algunos canecillos merecen
ser observados con detenimiento. Tal es el caso del aldeano vestido
con ropa de invierno que deja ver sus partes, seguramente para
calentarse al fuego. Tal representación es bastante frecuente
en los calendarios agrícolas o mensarios representando
alguno de los meses del invierno.
El ábside sur -el
más moderno- es más austero y prescinde del ventanal.
En la nave correspondiente tenemos la puerta que debió
ser desmontada de la primitiva iglesia y reconstruida en este
muro.
Es pequeña, con
arquivoltas de medio punto y dos parejas de columnas de las que
sólo nos quedan los capiteles. En época moderna
sufrió una reforma que disminuyó la luz del vano
de ingreso.
Villegas
La iglesia parroquial
de Santa Eugenia de Villegas es la suma de un edificio tardorrománico
(de bien entrado el siglo XIII) relacionado con el vecino templo
de Villamorón y dos campañas constructivas más
de los siglos XV y XVI.
Del primitivo templo románico
quedan varios restos: los pilares y columnas de algunos tramos
del interior, la puerta sur, una serie de canecillos, etc.
También encontramos
una buena pila bautismal románica.
Villamayor
de Treviño
La iglesia de la Natividad
de Nuestra Señora de Villamayor de Treviño es un
complejo edificio de varias etapas constructivas.
A nosotros nos interesa
especialmente el ábside de semitambor -obra de finales
del siglo XII- con dos contrafuertes y un ventanal reformado en
el centro.
De mediados del siglo
XIII debe ser la nave sur añadida a la románica
con su respectiva puerta de arcos apuntados completamente planos
y lisos.
En el interior se guarda
una notabilísima pila bautismal románica muy deteriorada.
Llama la atención la basa con dos enormes serpientes que
muerden sus cabezas.
La
iglesia de San Lorenzo de Villadiego
La iglesia de San Lorenzo
de la capital de la comarca, Villadiego, fue reconstruida casi
completamente a partir del edificio románico.
Del siglo XII conserva
una deteriorada pero buena puerta con varias arquivoltas de finos
boceles y escocias.
Una de ellas tiene una
serie de personajes bastante rudos y esquemáticos en disposición
radial, además de cenefas ajedrezadas y en punta de diamante.
Ermita de Nuestra Señora de Zorita de Melgar de Fernamental
La
Ermita de Nuestra Señora de Zorita se encuentra a unos
tres kilómetros de Melgar de Fernamental, ya que era la
iglesia parroquial del desparecido pueblo de Zorita.
En la
actualidad nos ofrece un bien articulado ábside con contrafuertes
y ventanales, además de un curioso pórtico neorrománico
construido en 1950 por Emigilio Martín Terradillos con
capiteles inspirados en el claustro de Silos.
Lo más
notable del interior son los capiteles del arco triunfal. Fueron
esculpidos en ellos dos grifos encaramados sobre leones y una
serie de personajes de difícil interpretación, uno
de los cuales -una mujer- porta un halcón en su mano.
La
singular iglesia de Villamorón
La iglesia de Santiago
de Villamorón es uno de los edificios más sorprendentes
no sólo de la comarca de Odra-Pisuerga sino de todo el
ámbito rural burgalés.
Fue el templo parroquial
de Villamorón, población hoy prácticamente
deshabitado a muy poca distancia de Villegas.
Tras la restauración
reciente de la que ha gozado y su emplazamiento sin edificios
cercanos que limiten su visión (salvo por su extremo occidental)
nos permite disfrutar de una contemplación perfecta de
tan majestuoso edificio.
En sentido estricto, este
templo tiene poco ya de románico y habría que clasificarlo
de primer gótico con hechuras sobrias -casi castrenses-
propias de la arquitectura cisterciense que tanta presencia tuvo
en Castilla. No obstante no podíamos dejar de advertir
al turista que se adentre en esta comarca de la existencia de
esta construcción, pues no se arrepentirá de visitarla.
Su fecha de erección podría calcularse
alrededor del tercer cuarto del siglo XIII. Dispone de tres naves
separadas por pilares con ocho columnas periféricas (para
los arcos formeros y perpiaños, además de los cruceros
de las correspondientes bóvedas de crucería). Los
arcos alternan boceles y escocias mientras que los capiteles son
vegetales y estilizados. Todo ello nos vuelve a remitir a modelos
cistercienses como Las Huelgas de Burgos.
La cabecera es plana y sobre ella se levanta una
torre fortaleza.
En el hastial se abre un gran rosetón con
tracerías. Tuvo tres puertas: la occidental y la norte
lamentablemente tapiadas, mientras que la sur cuenta con arquivoltas
ligeramente apuntadas sobre las jambas.
La mayoría de los canecillos son geométricos
aunque todavía alguno queda figurado de tradición
románica.
En definitiva un edificio donde contrafuertes, arimeces,
arcos, etc. nos muestran monumentalidad además de formas
ásperas y angulosas. Estamos ante una iglesia más
gótica que románica pero que no tiene como referencia
al gótico francés de la catedral de Burgos sino
la arquitectura bernarda que se diseminó por decenas de
monasterios en estas tierras castellanoleonesas, entre los siglos
XII y XIII.
Iglesia
de Arenillas de Riopisuerga
La iglesia de Arenillas
de Riopisuerga conserva de época románica su
ábside pues el resto fue rehecho en el siglo XVI. Pero
con todo, esta cabecera es de gran interés por lo poco
habitual en estas tierras.
Tiene planta semicircular,
construido con sillería. El muro se anima con dos anchos
contrafuertes que lo seccionan en tres paños con una ventana
de arquivolta algo aguda en cada uno.
Lo que da originalidad
a esta iglesia es el coronamiento, pues en lugar de los habituales
canecillos soportando el alero, muestra una arquería ciega
sostenida por ménsulas. Los motivos escultóricos
de dichas ménsulas son cestas vegetales a modo de capiteles
y cabezas de animales.
Aunque esta composición
muraria se relaciona a veces con la arquitectura lombarda, la
referencia más directa es la de ciertas iglesias zamoranas
y gallegas que ofrecen la misma articulación de la cornisa.
Otras
iglesias románicas de la Comarca de Odra - Pisuerga
Dada
la gran extensión de la comarca y la densidad de iglesias
y ermitas románicas, debemos recomendar visitar estas tierras
con tiempo y combustible suficiente para recorrer con detenimiento
la mayoría de los pueblos y aldeas, pues casi todos conservan
restos románicos de mayor o menos entidad.
De todo este panorama,
resaltaremos la iglesia de Padilla de Arriba, con potente
y voluminoso ábside; la iglesia de Susinos del Páramo,
con interesante portada con columnas de capiteles historiados,
como el que muestra una sirena de doble cola; el templo de Quintanilla
de Riofresno que muestra una preciosa y alta espadaña,
como las que son habituales en el norte de Burgos y Palencia;
la modesta pero preciosa ermita de San Cristóbal de
Sotresgudo, ubicada en un paraje aislado y de gran belleza.
En Olmos de Picaza,
la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción es más
gótica que románica, pudiendo ser obra del siglo
XIII, con tres naves separadas por arcos sobre pilares cruciformes
y columnas adosadas. La portada es también de esta época.
Otros restos románicos
menores quedan en la iglesia de Villegas, prácticamente
reconstruida en gótico.